Hoy me llamo cobardía, y tu, te dices amada,
Víctima de un mal discurso, cantado en vidas pasadas
Cuando verde era el olivo y madura la guitarra
El Olimpo, Nueva
York, la alcantarilla, la Habana.
Hoy, para no verte tatuada en el dolor de mis alas,
Juglares de mis infiernos reman en comparsa blanca
porque azul se hizo el destino y el horizonte las aguas
Donde se asfixia el amor y se deshidrata el alma.
Hoy, me consume la punta de la palabra callada
Apagando la sonrisa que te tenia guardada,
Que gris color del deseo, que a ciegas muere en mi cama
Amor de tristeza inerte que en Madrid se me derrama.
Hoy, a pesar del reloj de la próxima semana,
Cierro los ojos al tiempo, dejo correr la venganza
Lenta por tus mejillas, morena piel que me amarra
Amor de tristeza inerte, que a mi candil le regala.
Hoy la verdad languidece en la mentira que amas
Y atraviesas mi razón con tu mas fiel estocada
A olvido sabe el futuro, mas oscura es la esperanza
El Olimpo se derrumba, el sol, se muere en la Habana.
Hoy el verso de costumbre,
esconderá tus pisadas
Entre las hojas de Otoño y el verde de tu mirada,
Voy a vendarte el placer, voy a comerciar tus ganas
Hoy voy quererte tanto, para no pedirte nada.
H. Fernandez
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